[Vídeo] Habla Javier Roca, el policía de Madrid que mostró su apoyo públicamente al 15M y fue expedientado

Patricia Simón- Javier Roca Sierra, el policía de Madrid que mostró su apoyo públicamente al 15-M, conversa con Periodismo Humano. Hoy ha comparecido ante el Régimen  Disciplinario del Ayuntamiento de Madrid, que le abrió un expediente  grave por “abuso de atribuciones”. CCOO denuncia el fuerte  dispositivo de antidisturbios que vigilaban la Jefatura a la que ha  tenido que acudir. Su discurso en la Puerta del Sol le podría costar  perder hasta su casa.

Éste es un mensaje personal, hablo en mi nombre y sólo en mi nombre.  Me llamo Javier Roca Sierra, todo está relacionado con la montaña. Soy  policía, de Madrid…

Su discurso ante miles de personas, muchas llegadas a la Puerta del  Sol tras días o semanas recorriendo España en lo que se llamaron Marchas  Populares Indignadas, extrañó a muchos, no fue creído por otros pocos,  pero, según nos cuentan los que estuvieron presente y deducimos por el  video, sobre todo provocó una profunda emoción. Tras dos meses, este  movimiento que nació con el grito de “Democracia Real Ya”, integrado  especialmente por jóvenes que, en su mayoría, no habían tenido  enfrentamientos previos con la Policía, las palabras de apoyo de Javier  Roca legitimaban y arropaban el movimiento.

Ahora, el Ayuntamiento de Madrid le ha abierto un  expediente grave  por “abuso de atribuciones”. El castigo, hasta tres meses sin empleo ni  sueldo, puede ser el mismo o mayor que el de los agentes que apalearon a un  fotoperiodista a puñetazos y abofetearon a una menor,  en una manifestación contra la violencia policial empleada contra la  Marcha Laica. La diferencia es que el sindicato policial al que estaba  afiliado Javier Roca no podrá defenderlo, ni pagarle el sueldo  correspondiente a esos días porque los hechos de los que se le acusa  tuvieron lugar fuera del horario de servicio. Aunque la acusación sea  precisamente haber hecho declaraciones identificándose como policía.

Javier Roca durante su intervención en la Puerta del Sol el 23 de julio

Javier Roca ha prestado hoy declaración ante el Régimen disciplinario  del Ayuntamiento de Madrid, y no ante Asuntos Internos de la Policía  Municipal de Madrid, que es donde Javier pensó que recibiría un tirón de  orejas cuando decidió coger el micrófono y alzar la voz, “para llamar a  la reflexión, porque lo que está pidiendo el 15M no es para ellos, es  para todos, para nuestros hijos, se trata de humanidad, de la certeza de  que un mundo más justo es posible. Se trata de recuperar la compasión,  la capacidad de ponerse en el lugar del otro”, nos cuenta a lo largo de  varias conversaciones teléfonicas. Javier no se arrepiente e insiste en  que, amparado en su derecho constitucional a la libertad de expresión,  dijo que era policía, “pero no iba uniformado, ni mostré la placa, ni  dije a qué cuerpo policial pertenecía”. Las palabras justicia,  compasión, solidaridad, humano se repiten en las conversaciones con  Javier.

Cuando el policía municipal ha comparecido hoy ante el Régimen  Disciplinario ha preferido no declarar, porque se encontraba muy  nervioso y porque no quería defenderse ante la convicción de que no ha  hecho nada incorrecto. Lo único que ha expresado es que desea que se  anule el proceso. Y todo esto ocurre a la vez que su mujer está en el  paro, y si se le suspendiera de empleo y sueldo, tendría serias  dificultades para pagar las cuotas hipotecarias de esa casa que  representa el sueño de toda una vida, “pequeña pero muy bonita”, pero  que ahora siente que no basta para dejar de decir lo que piensa, “por  responsabilidad, por coherencia, por el mensaje que les quedará a mis  hijos”. Eso no impide que su salud haya empeorado a causa de la ansiedad  que esta situación supone para él y toda su familia. Su banco ya le ha  dicho que no les ayudará si no pueden pagar la hipoteca. Y todavía  tendrá que esperar una semana más antes de que el Ayuntamiento de Madrid  le comunique la resolución de este expediente.

Sin embargo, cuenta que en el cuerpo policial muchos compañeros le  han mostrado su apoyo, su buzón de Facebook -cada día aumenta su número  de amigos- está a rebosar de mensajes de ánimo y     se ha abierto una petición en la plataforma Actuable para pedir que se anule el expediente,  que ya lleva más de 2000 firmas. Todo ello, según nos cuenta, hace más  llevadera la incertidumbre de estos días. Sobre los que han mostrado su  desacuerdo por sus palabras pronunciadas públicamente, explica: “lo  respeto, pero ¿cómo se puede estar en contra  de los que piden un mundo  más justo?”. Y añade, “hay gente en el cuerpo policial que piensa que  los ciudadanos del 15-M tienen algo en contra de ellos, pero no es así  en absoluto”.

Acogida del discurso de Javier Roca en la Puerta del Sol

Durante toda su vida Roca ha tenido sensibilidad social. De hecho,  así es como entiende su trabajo en la Policía, como un servicio público  destinado “a acompañar a esta sociedad en su crecimiento, en su  desarrollo”. Por eso, durante los cinco años que patrulló por el centro  de Madrid, solía irse media hora antes sólo, con comida y mantas para  algunos de los sin techo o dependientes de la heroína que  sobrevivían en sus calles. Y a la vez, resalta, “yo vivía muy bien, cómo  no iba a vivir bien en este país. Pero, en una charla de José Melé,  fundador de Triodos Bank, empecé a cambiar mi visión. Nos dijo que  cuando hablábamos tanto de la crisis, ‘¿a cuál nos referíamos, a la  sistémica de África o América Latina, a la asiática…?’ El cambio  necesario no es sólo económico, sino que empieza por uno mismo. Luego,  cuando vi lo que pasó en la Plaza de Catalunya, el desalojo violento y  cómo la gente no se movía, y miraba directamente a los ojos de los  antidisturbios y no respondían a los golpes de las porras, pensé: ‘Esta  gente va en serio”. Y sentencia: ” También sé que en el momento en que  este movimiento deje de ser pacífico, desaparece”.

Javier recuerda como un momento crucial en el que sintió “que la   sociedad podía ser una piña” el 11-M: “Allí no había uniformes,  estábamos todos  metidos en la misma barbarie y fuimos capaces de  ponernos en la piel  del otro”. La profunda preocupación de Javier se  mezcla con un tono de voz y sensaciones que tienen los tintes de la  tranquilidad que otorga la coherencia. “Esta solidaridad que siento  ahora mismo no la sentía antes. Podré perderlo todo, pero ahora sé que  uno puede perderlo todo, tener que irse a vivir al campo y ser feliz”.

En medio de un fuerte dispositivo  de seguridad, comparece en el departamento de Gestión Disciplinaria, el  policía expedientado que en su tiempo libre apoyó al movimiento 15-M

Por la Sección Sindical de Seguridad y Movilidad de Comisiones Obreras

Dos furgones de tipo antidisturbios, y  aproximadamente 15 agentes de la UCS equipados al completo, vigilaban, y  filtraban las entradas a la Jefatura.

A las 10: 30 h del día 28 de septiembre de 2011, Javier Roca Sierra, en  compañía de su mujer, de un compañero de trabajo, y del Srio. de Acción  Sindical de la Sección Sindical de CCOO de Seguridad y Movilidad,  accedían a las dependencias de Gestión Disciplinaria para prestar  comparecencia como inculpado por “abuso de atribuciones”; todo en mitad  de un desproporcionado operativo de seguridad que demuestra el pánico de  la jefatura al descubrir que el Cuerpo de Policía Municipal cuenta con  gentes valientes e independientes, que como Javier, están dispuestas a  ejercer y defender de forma pacífica y sensible, no solo su derecho a la  libertad de expresión, sino un mundo mejor.

Javier Roca, inculpado por manifestar su apoyo al movimiento 15M, y  participar como ciudadano, viene sufriendo un rápido deterioro en su  salud como consecuencia de la injusticia que supone el verse inculpado  disciplinariamente por ejercer un derecho constitucional como ciudadano.  Desde agosto, Javier, ha perdido casi 15 kilos, y hace unos días tuvo  que acudir de madrugada a las urgencias con un fuerte cuadro de  ansiedad.

A Javier le afecta gravemente tener que ser interrogado por ejercer su  derecho a la libertad de expresión, y frente al instructor, hoy a Javier  le faltaba el aire. De hecho, Javier, ha manifestado no estar  arrepentido de nada de lo que ha dicho, en referencia a su participación  en la Puerta del Sol el pasado mes de julio. Ahora solo queda esperar  al pliego de cargos.

Para CCOO de la Sección Seguridad y Movilidad, estamos ante un nuevo  dislate disciplinario que pretende corregir el sentimiento de un  ciudadano de oficio policía, que es sensible a su tiempo. Como en otras  ocasiones, la Jefatura parece; y es que no existe ninguna norma que le  obligara a Javier a ocultar su profesión cuando se decidió, como un  ciudadano más, a manifestar su apoyo al 15M en una asamblea abierta a la  ciudadanía.

sociedad/libertad-y-justicia/habla-javier-el-policia-expedientado-del-15-m.html

 

« 21 empresas del Ibex tienen filiales en paraísos fiscales

El Aupa Lumbreiras 2012 cambiará de fecha y población »