Cómo negociar una hipoteca
Buen articulo el que se han currado la compañera PAU del Komandoazeitunas. En esta ocasión voy a ser yo ,usurpando un poquito el espacio de Malice, la que intente aclararos de forma entendible el tema de las hipotecas y sus caracterísiticas.
Aunque estemos en tiempo un poco difíciles para comprar vivienda me ha parecido interesante plantear este tema porque son varios los que me han pedido asesoramiento sobre ello. Voy a intentar explicar en qué nos tenemos que fijar cuando vamos a pedir una hipoteca y en qué tenemos que negociar y podemos.
Lo primero decir que siempre y digo siempre se puede negociar una hipoteca. Y esto vale para todas las relaciones que mantenemos con bancos y cajas: comisiones, tarjetas, servicios por internet… Los bancos tienen unas condiciones no cerradas que nos ofrecen siempre en primera instancia que si no negociamos serán las peores para nosotros y las mejores para ellos, por supuesto. Por ello podemos y debemos negociarlas porque siempre las pueden rebajar, aunque nos digan en principio que no. Cuando yo trabajaba en banca me sorprendía la persona que me negociaba algo, así que seamos nosotros los que les sorprendamos.
Vayamos al grano. Cuando vamos a solicitar una hipoteca tenemos que tener presente los siguientes puntos:
1. El tipo de interés que nos cobran. Éste puede ser fijo o variable siendo la segunda opción la más frecuente. En el segundo caso se fija un diferencial que se suma al llamado euribor que fluctua con el tiempo. Es por ello que comenzaremos con un tipo y cada año o cada semestre irán cambiando nuestras cuotas conforme lo hace el euribor.
En este punto tenemos que tener en cuenta tanto el importe del diferencial (que sea los más bajo posible) como la existencia del llamado suelo. El suelo es un mínimo que se pacta en las hipotecas de forma que el tipo de interés no puede bajar de él aunque lo haga el euribor. Esto es un perjuicio para nosotros por cuanto aunque baje el euribor nuestra hipoteca no bajará porque tenemos un tipo mínimo aplicado. Debemos preguntar al respecto y negociar que no nos establezcan este suelo.
Además de todo lo anterior, que no es poco, debemos puntualizar que no nos hagan redondeo en el tipo de interés final ya que siempre redondean hacia arriba.
2. COMISIÓN DE APERTURA. Esta comisión suele rondar el 1% aunque puede bajar hasta el 0,5%. Siempre debemos negociarla siendo este último porcentaje el recomendable, y si es menos mejor. Al aplicarse sobre el importe del préstamo, esta comisión será mayor cuanto más dinero pidamos.
3. COMISIONES DE CANCELACIÓN. En este apartado tenemos dos tipos de comisión: cancelación parcial y total. Debemos intentar siempre que la comisión de cancelación parcial sea cero y no es difícil de conseguir. Así que haremos hincapié en que sea cero y de este modo siempre que tengamos un dinerillo podemos hacer una amortización parcial para reducir tiempo de mi hipoteca o reducir la cuota.
Con respecto a la cancelación total es más complicado conseguir una comisión cero pero debemos intentarlo y lucharlo. Si queremos cancelarla totalmente siempre es posible hacer parciales que no nos cobran y así librarnos de la comisión por cancelarla totalmente.
4. Además de los gastos anteriores en ocasiones nos obligan a hacernos un SEGURO DE VIDA o el SEGURO DE LA CASA con la entidad bancaria y en este caso son demasiado persistentes por lo que será complicado conseguir que no sea así. De todos modos como siempre digo todo se puede negociar. Estos gastos extras hacen que mi préstamo sea más caro por lo que tendré que tenerles en cuenta.
5. Con todo lo que hemos dicho resulta difícil a la hora de comparar préstamos entre diferentes entidades ya que en una puede que me cobren menos de diferencial pero más de comisión de apertura, o que no me hagan hacer un seguro que en otra entidad sí. Para poder comparar por lo tanto cuál es la mejor opción debemos fijarnos en lo que se llama el TAE. Éste es un tipo de interés que comprende tanto el tipo de interés que me van a cobrar como todos los gastos que conlleva el préstamo. Por ello es más fiable para poder comparar diferentes ofertas, de modo que el préstamo que tenga menor TAE es el más interesante para nosotros. Si no le conocemos le preguntaremos y compareremos las distintas ofertas de los distintos bancos o cajas para poder decidirnos.
Para facilitarnos los cálculos y preveer todos los gastos, existen en internet un montón de simuladores interesantes que por no hacer publicidad de entidades bancarias no voy a expresar, os parece?. Pero si ponéis en google o donde sea “simulador préstamo hipotecario” os salen un montón de ellos.
Menudo peñazo os dejo aquí, jejeje. Espero que con todo ello os halla servido para aclararnos un poco y os ayude en esta decisión tan importante que nos hipotecará durante muchos años, jejeje que me pongo dramática.
En esta ocasión voy a ser yo ,usurpando un poquito el espacio de Malice, la que intente aclararos de forma entendible el tema de las hipotecas y sus caracterísiticas.
Aunque estemos en tiempo un poco difíciles para comprar vivienda me ha parecido interesante plantear este tema porque son varios los que me han pedido asesoramiento sobre ello. Voy a intentar explicar en qué nos tenemos que fijar cuando vamos a pedir una hipoteca y en qué tenemos que negociar y podemos.
Lo primero decir que siempre y digo siempre se puede negociar una hipoteca. Y esto vale para todas las relaciones que mantenemos con bancos y cajas: comisiones, tarjetas, servicios por internet… Los bancos tienen unas condiciones no cerradas que nos ofrecen siempre en primera instancia que si no negociamos serán las peores para nosotros y las mejores para ellos, por supuesto. Por ello podemos y debemos negociarlas porque siempre las pueden rebajar, aunque nos digan en principio que no. Cuando yo trabajaba en banca me sorprendía la persona que me negociaba algo, así que seamos nosotros los que les sorprendamos.
Vayamos al grano. Cuando vamos a solicitar una hipoteca tenemos que tener presente los siguientes puntos:
1. El tipo de interés que nos cobran. Éste puede ser fijo o variable siendo la segunda opción la más frecuente. En el segundo caso se fija un diferencial que se suma al llamado euribor que fluctua con el tiempo. Es por ello que comenzaremos con un tipo y cada año o cada semestre irán cambiando nuestras cuotas conforme lo hace el euribor.
En este punto tenemos que tener en cuenta tanto el importe del diferencial (que sea los más bajo posible) como la existencia del llamado suelo. El suelo es un mínimo que se pacta en las hipotecas de forma que el tipo de interés no puede bajar de él aunque lo haga el euribor. Esto es un perjuicio para nosotros por cuanto aunque baje el euribor nuestra hipoteca no bajará porque tenemos un tipo mínimo aplicado. Debemos preguntar al respecto y negociar que no nos establezcan este suelo.
Además de todo lo anterior, que no es poco, debemos puntualizar que no nos hagan redondeo en el tipo de interés final ya que siempre redondean hacia arriba.
2. COMISIÓN DE APERTURA. Esta comisión suele rondar el 1% aunque puede bajar hasta el 0,5%. Siempre debemos negociarla siendo este último porcentaje el recomendable, y si es menos mejor. Al aplicarse sobre el importe del préstamo, esta comisión será mayor cuanto más dinero pidamos.
3. COMISIONES DE CANCELACIÓN. En este apartado tenemos dos tipos de comisión: cancelación parcial y total. Debemos intentar siempre que la comisión de cancelación parcial sea cero y no es difícil de conseguir. Así que haremos hincapié en que sea cero y de este modo siempre que tengamos un dinerillo podemos hacer una amortización parcial para reducir tiempo de mi hipoteca o reducir la cuota.
Con respecto a la cancelación total es más complicado conseguir una comisión cero pero debemos intentarlo y lucharlo. Si queremos cancelarla totalmente siempre es posible hacer parciales que no nos cobran y así librarnos de la comisión por cancelarla totalmente.
4. Además de los gastos anteriores en ocasiones nos obligan a hacernos un SEGURO DE VIDA o el SEGURO DE LA CASA con la entidad bancaria y en este caso son demasiado persistentes por lo que será complicado conseguir que no sea así. De todos modos como siempre digo todo se puede negociar. Estos gastos extras hacen que mi préstamo sea más caro por lo que tendré que tenerles en cuenta.
5. Con todo lo que hemos dicho resulta difícil a la hora de comparar préstamos entre diferentes entidades ya que en una puede que me cobren menos de diferencial pero más de comisión de apertura, o que no me hagan hacer un seguro que en otra entidad sí. Para poder comparar por lo tanto cuál es la mejor opción debemos fijarnos en lo que se llama el TAE. Éste es un tipo de interés que comprende tanto el tipo de interés que me van a cobrar como todos los gastos que conlleva el préstamo. Por ello es más fiable para poder comparar diferentes ofertas, de modo que el préstamo que tenga menor TAE es el más interesante para nosotros. Si no le conocemos le preguntaremos y compareremos las distintas ofertas de los distintos bancos o cajas para poder decidirnos.
Para facilitarnos los cálculos y preveer todos los gastos, existen en internet un montón de simuladores interesantes que por no hacer publicidad de entidades bancarias no voy a expresar, os parece?. Pero si ponéis en google o donde sea “simulador préstamo hipotecario” os salen un montón de ellos.
Menudo peñazo os dejo aquí, jejeje. Espero que con todo ello os halla servido para aclararnos un poco y os ayude en esta decisión tan importante que nos hipotecará durante muchos años, jejeje que me pongo dramática.
Un saludo enorme para linea36, me alegra que se pueda aprovechar el artículo y espero haber podido ayudar a aclarar este laberinto de conceptos que no nos explican nunca.
Además aprovecho la ocasión para agradecer el “pedazo” detallazo del banner, nos hemos quedado de piedra, gracias, gracias y mil gracias compañero.